No solo los libros adquieren vida propia en las películas e historias sobre magos y hechiceros. La ciencia y el amor pueden obrar "milagros" multidimensionales.
En una sociedad/mundo decadente que no acaba de morir, aunque debería, por el bien de todos y del planeta... Una descubre de tanto en tanto perlas de reflexión y placer como esta película imprescindible, una obra maestra que envejece mejor incluso que los buenos vinos. Ya va a cumplir una década, pero nunca dejará de estar vigente ni en lo artístico, ni en lo filosófico, ni en lo vital.
Más allá del dinero, de la tecnología, de la ciencia (astrofísica) y del espectáculo de los viajes espaciales, una alegoría perfecta, desde su estreno me fascinaron el viaje interior y el viaje exterior que plantea y por los que se pregunta en cada segundo de metraje. Esta distopía, cada día menos ficción y más realidad, nos recuerda varias cuestiones. Citaré las tres más importantes, en mi opinión.
La primera: cuánto mal le hemos hecho y le seguimos haciendo a la Madre Tierra que habitamos hoy y que, por ello, no habitaremos durante mucho tiempo ("La humanidad nació en la Tierra, pero no morirá aquí"), con el drama que supone y supondrá para las generaciones presentes y futuras en forma de enfermedades, carestías, muertes, emigraciones a gran escala dentro y fuera del planeta...
La segunda: no debemos confiar en lo que parece correcto a priori pero que se hace por razones equivocadas (el sistema, los intereses creados, los poderes fácticos y los gobiernos), lo que realmente importa es el porqué, sobre todo ligado al bien común, a la protección del planeta y a la tercera cuestión.
La tercera: de todo cuanto percibimos, el amor es lo único que trasciende las dimensiones del espacio y del tiempo, por eso deberíamos aferrarnos a él, confiar en él, aun cuando no logremos entenderlo.
Sin duda es la gran peli de los últimos 10 años y una de las mejores de la historia. Verla cada fin de año se ha convertido en un rito que os recomiendo, un agujero negro colmado de luz, 169 minutos de infinitas dimensiones, reflexión y placer.
¡Atreveos a ser astronautas!
“Do not go gentle into that good night;
Old age should burn and rave at close of day.
Rage, rage against the dying of the light.
Though wise men at their end know dark is right,
Because their words had forked no lightning they
Do not go gentle into that good night.
Rage, rage against the dying of the light."
Dylan Thomas
la vejez debería delirar y arder cuando se acaba el día.
Rabia, rabia contra la luz que se esconde.
Aunque el sabio, cerca del fin, a la tiniebla no haga reproche,
dado que a su verbo ningún rayo ha confiado vigor,
no entra dócilmente en esa buena noche.
Rabia, rabia contra la luz que se esconde.”
(Traducción para la película